Con el paso del tiempo, los avances en soporte vital han sido asombrosos, la tecnología y la globalización han llevado a la vida de los seres humanos a extenderse más allá de lo que creíamos posible, en apenas un siglo.
No obstante, dichos avances no han sido siempre favorables a la salud, y quienes logran vivir más años, muchas veces lo hacen a expensas del consumo de fármacos de por vida o sufriendo enfermedades crónicas que los aquejan y, en muchos casos, los alejan de sus seres queridos y de la sociedad.
La Medicina de la Longevidad busca disminuir la brecha existente entre el “vivir mucho” y “vivir bien”, haciendo énfasis en la prevención temprana y otorgando herramientas simples y flexibles, para adquirir hábitos saludables como la nutrición adecuada, la actividad física segura y el manejo del estrés.
Está demostrado que luego de 2 años de cambio de hábitos, las células de nuestro cuerpo subsanan el daño provocado, permitiendo mayor flexibilidad física, agilidad mental, normalización de análisis de laboratorio, disminución de riesgo de padecer ciertas enfermedades, mejora de la autoestima, entre otros.
“Siempre es un buen momento para iniciar un cambio, cuanto antes te lo permitas, mayores posibilidades tendrás de disfrutar del bien vivir por mucho más tiempo”, explica la Dra. Claudia Piedrabuena, directora de Calma Longevidad y Estética (MP 5150; MN137015).
Ella es también especialista en Dermatología Holística, Medicina del Estrés y PsicoNeuroInmunoEnocrinología clínica.
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