Ortega, mostro a las autoridades la planta artesanal de empaque de cerezas y el monte frutal. El crédito que obtuvo el productor fue de gran ayuda para montar una línea de empaque e instalar una cámara de frío. Antes realizaban esa labor sobre una mesa y no tenían la posibilidad de conservar las cerezas.
“En este caso también hablamos de generar valor agregado porque este productor ahora puede clasificar y comercializar su fruta de otra manera. Hoy vemos como ese empaque, financiado por una línea de valor agregado, empieza a funcionar y tiene más de 20 personas trabajando en su establecimiento” comentaron las autoridades.
La pequeña pyme de Ortega comenzó a crecer y hoy su empresa de empaque funciona con más de 20 personas trabajando en el establecimiento.
Además, a comienzos de este año, adquirió un software que permite el pesaje de frutos con alta precisión, mejorando así la separación por calibres y la cantidad de fruta a embalar por unidad de tiempo. De esta manera el Programa de Agregado de Valor (ProPAV) financió el 65% de la inversión total en el proyecto, por un total de $2.963.000.
En el alto valle de Río Negro se encuentran varios productores de cereza y para este año se espera un volumen normal de producción, pero con una fruta de muy buena calidad. Una particularidad del 2022 es que se adelantó la temporada porque hubo una floración más temprana, lo que permitió iniciar los trabajos una semana antes de las previsiones del INTA.
En este momento se trabaja en la extracción de la Royal Dawn, caracterizada por ser un fruto grande, con forma de corazón, de pulpa muy roja, con un sabor intenso. Su cosecha en general inicia a mediados de noviembre.
Además de la Royal Dawn, se recolectan en la zona la Brooks, Santina, Sumelle, Bing, Skeena Lapins, Sirtom y SweetHeart, la variedad que se cosecha a mediados de diciembre.