Néstor Rivas, propietario de Libracos, expresa con alegría el reconocimiento obtenido: “Empezó en tierra fértil, pero había que ararla”, dice, reflejando el esfuerzo y la dedicación que han sostenido la librería a lo largo de los años. Junto a él, su hijo Santiago comparte el compromiso con esta travesía cultural.
Libracos ha sobrevivido numerosas crisis económicas en la última mitad de siglo, incluyendo una notable en 2021, que logró superar gracias a la solidaridad y cariño de miles de neuquinos que acudieron a comprar un libro. Rivas agradece constantemente el apoyo recibido: “Recibimos satisfacciones desde que entramos, desde siempre. El rubro libro es algo muy importante, es repartir un poco de cultura, ayudar al docente y los docentes nos ayudan a nosotros, es un intercambio”.
A pesar de los desafíos modernos, Rivas se mantiene optimista sobre el futuro del libro: “Fortalecer el libro cuesta cada vez más porque hay otras cosas, pero hay que seguir luchando. No va a morir nunca el libro, eso es bueno”.
María Pasqualini, Jefa de Gabinete de Neuquén, destaca la importancia de Libracos en la vida de la ciudad, que en septiembre cumple 120 años: “Libracos tiene prácticamente la mitad de la historia de la ciudad. Es un pedacito de cada uno de nosotros”. Pasqualini, una defensora del libro y del diario de papel, subraya la conexión profunda entre la librería y los habitantes locales: “Soy de la generación que necesita dejar marcada la hojita doblada, y no encontrás en la calle a un neuquino o neuquina que no te diga yo fui a Libracos”.
Santiago Rivas, hijo del propietario, enfatiza la importancia de acercar los libros a los niños: “Un nene que lee es un adulto que piensa. Cuando le das la oportunidad a un chico de acceder a un libro, ya sea desde una librería o una biblioteca, le estás dando una herramienta fundamental para la vida”. Añade que el libro es una fuente de estudio, recreación, ocio e imaginación, destacando la capacidad de los autores para crear mundos que permiten a los lectores viajar y soñar.
Libracos, con más de medio siglo de historia, continúa siendo un faro de cultura y conocimiento en Neuquén, reflejando el amor y la dedicación de una comunidad que valora profundamente el poder de la lectura.
Libracos no solo ha sido un punto de venta de libros, sino también un centro de encuentro para la comunidad. Sus estanterías han albergado innumerables historias y conocimientos, sirviendo como un refugio para los amantes de la lectura y un espacio de descubrimiento para los jóvenes. Néstor y Santiago Rivas han trabajado incansablemente para mantener viva esta llama cultural, organizando eventos, presentaciones de libros y actividades para fomentar el hábito de la lectura entre los más pequeños.
La librería ha evolucionado con los tiempos, adaptándose a las nuevas tecnologías y a los cambios en los hábitos de consumo. Sin embargo, su esencia permanece intacta. La calidez de su ambiente y la atención personalizada siguen siendo sus principales distintivos. Libracos ha sabido equilibrar la modernidad con la tradición, ofreciendo tanto libros en formato físico como servicios digitales, siempre con el objetivo de facilitar el acceso a la cultura y el conocimiento.
Este reconocimiento a Libracos no solo celebra su longevidad, sino también su resiliencia y su capacidad para reinventarse. En un mundo donde las librerías independientes enfrentan numerosos desafíos, Libracos se erige como un ejemplo de perseverancia y pasión. La comunidad de Neuquén ha jugado un papel fundamental en su supervivencia y éxito, demostrando que el amor por los libros y la lectura sigue siendo una fuerza poderosa y vital.
Libracos, la librería que cumple 51 años de cultura y resiliencia en Neuquén
Libracos, una librería con 51 años de trayectoria en Neuquén, ha sido reconocida por su duradera contribución a la comunidad de una ciudad que apenas le dobla la edad. Una placa en el frente de su local, ubicado en la calle Corrientes 282, destaca su historia y llama la atención de los vecinos que conocen su legado.