De esta manera Shell se asegura que Transportadora Gas del Sur provisione de servicios midstream (transporte) de deshidratación, filtrado, regulación y medición de gas con una capacidad de hasta 1 millón de metros cúbicos por día, a la boca del pozo del bloque que opera la petrolera holandesa.
Ambas empresas prevén firmar un nuevo acuerdo para inyectar la producción en el gasoducto Vaca Muerta Norte, que será acondicionada en la planta Tratayén, dos obras que TGS construyó y puso en funcionamiento en 2019 en la cuenca neuquina.
De esta manera, se convertirá en la octava empresa conectada al sistema de gasoductos de la transportista, sumándose a Pluspetrol, Pampa Energía, Exxon, GYP, Total, Tecpetrol, e YPF, confirmando un modelo de negocio de contratación de todos los servicios midstream, externos al rol principal de perforación.
Ambas compañías consideraron que el acuerdo tiene el "potencial de ser un modelo futuro para toda la industria", y "un primer paso de muchas otras oportunidades de cooperación".
De esta manera, destacaron que el proyecto consolida la presencia de TGS como midstreamer en la cuenca neuquina y le permite a Shell seguir ganando eficiencia y conocimiento en su bloque.
En ese sentido, la petrolera ratificó que seguirá haciendo foco en la perforación, complementación y testeo de pozos con la finalidad de obtener datos de reservorios que le permitan optimizar su proyecto de desarrollo del bloque que opera junto a YPF como socia.
En la actualidad Shell opera los bloques de Sierras Blancas, Cruz de Lorena, Coirón Amargo Sur Oeste y Bajada de Añelo y mantiene un porcentaje de participación en el bloque Bandurria Sur, operado por YPF, y en dos bloques operados por Total Austral: La Escalonada y Rincón La Ceniza.