Con esta medida se incorpora la certificación de productos acuícolas norpatagónicos con destino a exportación, una actividad que atraviesa un proceso de expansión en la región. La iniciativa busca descentralizar trámites y optimizar tiempos, facilitando la logística de los productores.
La apertura de esta oficina posibilitará que la certificación de truchas se realice en Centenario, evitando que los exportadores deban trasladarse hasta San Antonio Oeste o San Carlos de Bariloche, que eran los únicos puntos habilitados en la Patagonia. Esto representa un ahorro en tiempo y costos para el sector.
Durante la recorrida inaugural estuvieron presentes la coordinadora general de Certificación e Información del organismo, Andrea Bravo; el director regional del Senasa, Ricardo Sánchez; el coordinador de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, Ariel Martín, y la gerente comercial del Depósito Fiscal, Natalia Muguerza.
En una primera etapa, la medida beneficiará principalmente al sector acuícola, aunque la empresa a cargo del depósito busca acreditarse como "dador de frío" para recibir y certificar otras mercaderías cárnicas de la zona. De concretarse, se unificarían en un mismo espacio los procedimientos aduaneros y la certificación final, mejorando la competitividad de los productores.
La iniciativa tiene un impacto directo en la logística. Hasta ahora, los envíos de productos frescos de acuicultura enfrentaban demoras de hasta 24 horas para arribar a los puertos o aeropuertos de salida, especialmente el Internacional de Ezeiza. Con la nueva dependencia y las inversiones previstas en el Aeropuerto de Neuquén, será posible enviar mercadería directamente desde la provincia hacia destinos como Estados Unidos y Japón.
El esquema de trabajo del Senasa contempla dos instancias de control. Primero, dentro del Depósito Fiscal, un veterinario del organismo realizará la inspección junto con personal de Aduana para otorgar la certificación definitiva.
Luego, en el Aeropuerto de Neuquén, agentes del Senasa llevarán a cabo una verificación complementaria cuando la carga pase del camión refrigerado al avión, completando el proceso de control y fiscalización.
Desde hoy, la oficina de Centenario está habilitada y cuenta con los sellos de firma internacional y etiquetas de seguridad necesarias para la certificación final de exportación de productos cárnicos.
Esta decisión representa un avance significativo para el sector exportador regional, ya que complementa la certificación de frutas frescas con la de productos acuícolas, abriendo la puerta a nuevas oportunidades comerciales.
Las autoridades remarcaron que la medida forma parte de la estrategia para potenciar el comercio exterior y consolidar a la Patagonia como región exportadora.
La incorporación de la certificación cárnica a la actividad del Senasa en Centenario aporta mayor competitividad a la producción local, alineándose con los estándares internacionales de inocuidad y calidad.
De esta manera, el organismo refuerza su rol en el desarrollo regional y en la apertura de nuevos mercados para los productos neuquinos y rionegrinos, consolidando un paso más en la integración de la Patagonia al comercio global.
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