La tradicional fiesta popular se consolida cada año como un punto de encuentro que combina gastronomía regional, espectáculos musicales, destrezas criollas y una fuerte impronta cultural que refleja el espíritu del norte neuquino. Para esta edición, la organización confirmó una serie de novedades que ampliarán las opciones gastronómicas y mejorarán la experiencia del público.
Una de las innovaciones será la preventa de chivitos con la posibilidad de adquirir porciones individuales, una modalidad que busca facilitar el acceso a quienes viajan desde otros puntos y a familias que deseen disfrutar del menú típico sin necesidad de comprar piezas completas. Esta iniciativa se suma a las acciones que cada año buscan hacer más accesible el evento.
En el predio principal funcionará nuevamente la Globa de Chivos, espacio clave de la fiesta, que estará a cargo del reconocido chef embajador de la gastronomía neuquina, Moncho Vázquez. Junto a su equipo, elaborará chivos al asador y diversas propuestas regionales que representan la tradición culinaria de la zona.
Para esta edición, se firmó un convenio por 300 ejemplares de chivos provenientes de la producción local. La articulación se realizó con la Comisión Regional de Desarrollo de la Cuenca del Curi Leuvú (Cordecc), dependiente del ministerio de Economía, Producción e Industria, que acompaña a las familias rurales en el fortalecimiento de sus ingresos.
Además de la gastronomía, la grilla artística será uno de los grandes atractivos del fin de semana. La municipalidad de Chos Malal confirmó espectáculos nacionales que se desplegarán durante las tres noches del evento, reforzando el carácter festivo del encuentro.
El viernes 21 de noviembre actuarán Los Campedrinos y Piko Frank; el sábado 22 será el turno de Los Herrera y Los Reales del Valle, dos propuestas de fuerte presencia en el folclore regional. Para el cierre del domingo 23 se espera la presentación de Lucas Sugo y Dale Q’ Va, artistas que suelen convocar a una gran cantidad de público.
Además de los shows musicales, el programa contempla actividades típicas de la tradición criolla, como destrezas gauchas, un campeonato de jineteada, exhibiciones y talleres culturales. También habrá stands de artesanos y propuestas para toda la familia.
La fiesta no solo celebra la gastronomía y las expresiones culturales, sino que también fortalece la economía regional. La venta de chivitos, la participación de productores locales y el movimiento turístico que genera el evento contribuyen al desarrollo del norte neuquino.
En este sentido, la habilitación del paso Pichachén permitirá una vez más recibir visitantes provenientes de Chile, consolidando el perfil binacional del evento y ampliando el flujo turístico hacia la ciudad.
Chos Malal, considerada la capital histórica y cultural del Neuquén, reafirma con cada edición su liderazgo en la organización de eventos identitarios que rescatan la tradición y la producción local. La Fiesta Nacional del Chivito es, sin dudas, uno de los más representativos.
Con todos los preparativos en marcha, la localidad se prepara para una nueva edición que promete convocar a miles de personas y mantener viva una celebración que refleja el corazón productivo y cultural de la región.
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