Daniel González, presidente de la entidad gremial, argumentó que “La cooperativa tiene uno de los costos tarifarios más altos del país y no está claro a que se destina lo que se recauda”, además agregó: “En virtud de la situación económica que vivimos, no podemos seguir afrontando cargos mensuales que no sabemos bien a que se destinan e impactan en nuestra actividad”.
Desde la entidad también se rechazó la intimación que se hizo desde CALF hacia la municipalidad para que aumenten un 38% la tarifa, “cuando deberían analizar su estructura de costos que no es transparente, al punto que ante el requerimiento municipal de abrir su estructura de costos para analizar el incremento tarifario solicitado, se negaron”.
“No puede ser que arreglos entre dirigentes políticos terminen impactando negativamente en una actividad que necesita reglas de juego claras para poder funcionar y crear empleo genuino”, concluyó González.