Desde mediados de 2022, el municipio implementó la exención del pago de la licencia comercial durante los primeros seis meses para cada nuevo emprendimiento. La medida comenzó como una experiencia piloto y, debido a los buenos resultados, fue incorporada en la ordenanza tarifaria vigente desde 2023.
La iniciativa se mantiene activa en 2024 y 2025, garantizando su continuidad como una herramienta de fomento para quienes deciden abrir un comercio en la ciudad. El beneficio implica un ahorro directo para los emprendedores, que pueden destinar esos recursos iniciales a fortalecer su actividad.
El intendente Carlos Koopmann destacó que el programa responde a una estrategia de acompañamiento al sector privado, considerado un motor clave de la economía local. Subrayó la importancia de apoyar a los vecinos que deciden apostar por la ciudad y generar empleo a través de sus proyectos.
El jefe comunal manifestó que el objetivo es sostener y ampliar las oportunidades de trabajo, al tiempo que se impulsa la circulación de bienes y servicios en la comunidad. Para el gobierno local, cada apertura representa un aporte al entramado productivo y social de Zapala.
Los rubros habilitados en este período abarcan una amplia variedad de sectores. Entre ellos se destacan almacenes, verdulerías, tiendas de ropa, corralones de materiales, kioscos, peluquerías, salones de eventos, institutos educativos y locales de alquiler de vehículos.
Este abanico de actividades refleja la diversidad de la demanda en la ciudad y la capacidad de respuesta de los emprendedores locales. La incorporación de nuevos servicios y comercios contribuye a dinamizar la vida urbana y a fortalecer la oferta a disposición de los habitantes.
La política municipal también busca brindar previsibilidad a quienes inician un proyecto. La exención del pago en los primeros seis meses ofrece un alivio financiero en una etapa clave, cuando los costos de inversión suelen ser más elevados y las ventas aún están en consolidación.
El respaldo político y económico otorgado a la medida desde su origen permitió que se convirtiera en una herramienta estructural de la gestión. La decisión de incorporarla a la normativa fiscal asegura su vigencia y la coloca como un eje de apoyo a la economía local.
La experiencia de Zapala se enmarca en una tendencia de gobiernos municipales que desarrollan programas de incentivo para atraer y sostener emprendimientos. En este caso, el resultado concreto se traduce en más de 170 habilitaciones en menos de dos años.
El crecimiento en el número de comercios habilitados también impacta en la generación de empleo. Cada nuevo local implica la creación de puestos de trabajo directos e indirectos, fortaleciendo la capacidad de la ciudad para absorber mano de obra.
El intendente Koopmann remarcó que el acompañamiento al esfuerzo de los vecinos es central en la política de su gestión. Consideró que se trata de construir un escenario donde cada emprendedor tenga la posibilidad de concretar su proyecto con respaldo institucional.
Con esta medida, Zapala consolida un modelo de gestión que combina apoyo directo, reducción de cargas fiscales y estímulo al sector privado. La experiencia busca convertirse en un ejemplo de cómo las herramientas locales pueden favorecer la creación de empleo y el crecimiento económico regional.