“Al momento de la inauguración solo contábamos con 15 camas, dos quirófanos, una sala de partos, y un servicio de Radiología”, recordó Victor Peláez, su fundador. Ahora, en la actualidad la Clínica Pasteur tiene 81 camas en sala general, 22 en Unidad de terapia Intensiva, 13 en Unidad Coronaria, 12 en Unidad Terapia Intensiva Neonatal, 6 en maternidad y 60 en el Centro de Rehabilitación. También, cuenta con cuatro quirófanos, una sala de parto, un servicio de hemodinamia y neurointervencionismo, un servicio de cirugía cardiovascular, servicio de diagnóstico por imágenes con equipamiento de última generación, y servicio de oncología. Y posee tres sedes de consultorios externos, ubicados en distintos puntos de la ciudad.
Por otro lado, tiene un Departamento de Docencia para médicos residentes en Terapia Intensiva, Clínica Médica, Cardiología, Cirugía, Diagnóstico por Imágenes, kinesiología y terapia ocupacional.
“Son más de 900 personas trabajando en la Institución actualmente”, comentó Peláez. También, expresó “tengo que agradecer al altísimo por, sobre todo, yo soñaba con el 19 de diciembre del 2020 de llegar a tener 92 años. Es decir que pasaron 50 años de aquellos 42 cuando dije algunas palabritas ahí en el vestíbulo de la clínica el día que se inauguró”.
En este sentido, Gutiérrez destacó el compromiso de la familia Peláez y de todos los trabajadores de Clínica Pasteur. “Esta institución es fruto de mucha gente, y ese engranaje que ha funcionado entre esa gente ha sido Víctor Peláez y su familia. Gracias por cuidar y salvar vidas”, sostuvo el gobernador.
Por su parte, el intendente Gaido indicó que “la ciudad de Neuquén les quiere decir gracias a la familia y a la clínica, y es un orgullo que esta institución que forma parte del sistema de salud en esta época tan difícil, esté siempre acompañándonos y cuidándonos, luchando por la salud de cada vecino y cada vecina”.