La reunión para abordar la seguridad laboral en la actividad tuvo como base las dos muertes que ocurrieron la pasada en Fortín de Piedra (el principal desarrollo de Tecpetrol en Vaca Muerta), que elevaron a 8 los fallecimientos de trabadores relacionados a la actividad en los últimos 15 meses.
En el encuentro, el jefe de Gabinete provincial, Sebastián González, señaló que “Estos incidentes han prendido las luces de alarma para todos los que intervenimos de alguna manera en el desarrollo de esta gran industria que es el petróleo y el gas”.
Fue bajo esta misma línea que el subsecretario de Trabajo, Ernesto Seguel, adelantó que “las inspecciones realizadas determinaron que hay cuestiones para mejorar en cuanto a la seguridad”, por lo que indicó que este jueves se realizará una nueva reunión “donde todos los sectores buscaremos avanzar en manuales de buenas prácticas”.
Sentado frente a los representes Pablo Bizzotto de YPF; Danny Masaccesse, COO de Pan American Energy y Horacio Marín, director de E&P de Tecpetrol, se encontraba Guillermo Pereyra, secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, quien tomó una postura algo más rígida. El líder sindical aseguró que “vamos a modificar todo lo que haga falta para garantizar la seguridad de los trabajadores”, y levantó una crítica en relación a que “muchas veces el trabajador duerme en un tráiler en el campo y lo despiertan a la noche para algún tipo de tarea, lo que hace que no descanse bien y no pueda trabajar seguro”.
Desde el sector que lidera Pereyra empujan por realizar diferentes modificaciones al diagrama de trabajo en los yacimientos. Como primer medida, sostienen que el régimen actual de 14×7 (14 días de trabajo por siete de trabajo) es insostenible, por lo que se busca que se pase a un esquema de 6×3.
Otro punto que se busca eliminar es la permanencia en los campamentos en los campos petroleros. Pereyra señaló que esto “no implica ninguna modificación de la adenda firmada oportunamente (al respecto), porque allí se habla claramente de la seguridad y de la capacitación que deben recibir los trabajadores”. De aprobarse esta propuesta, los gastos operativos de las empresas en relación a la movilidad de su personal pueden llegar a elevarse sustancialmente. Por lo que ahora, sólo resta esperar a ver qué se resuelve (si algo se resuelve), en la mesa grande de mañana.