El Kiosko Parque comenzó a funcionar en 1957 en Sarmiento y Avenida Argentina, una de las más emblemáticas esquinas de la ciudad neuquina. Cuando todavía las calles eran de tierra, los árboles no habían empezado a crecer y eran solo unos palitos. Sin embargo, y con el crecimiento de la ciudad y junto a la remodelación de lo que hoy es el Parque Central, el Kiosko se trasladó a la esquina de Sarmiento y San Luis. A partir de una transferencia comercial en 1985 se hizo cargo Julio Ferreyra del negocio y ahora está al frente su hijo, Luciano.
En este sentido y como los comercios constituyen un sector estratégico de desarrollo del trabajo y de la economía, la Municipalidad viene reconociendo a los que con medio siglo de trayectoria y más impactaron y lo siguen haciendo fuertemente en la vida de la ciudad. Esta vez, fue el turno del Kiosco Parque que funciona hace 64 años de manera ininterrumpida.
El intendente Mariano Gaido les entregó una placa que los declara “Comercio Histórico de la ciudad de Neuquén”. “Son un orgullo”, les dijo y apreció que este reconocimiento implica que los negocios neuquinos “sepan que se puede, que hubo momentos difíciles, que hubo que redoblar esfuerzos, que la familia aguantó”.
Por su parte, Ferreyra, en charla con IN Neuquén, sostiene que “el reconocimiento fue una sorpresa no esperada y un orgullo haber contribuido al crecimiento de la ciudad”. Además, apreció que es “un lindo reconocimiento para los vecinos de la ciudad, específicamente para los más jóvenes que no tienen conocimiento de cuáles son los espacios históricos que llevan más de una generación aportando al desarrollo de Neuquén”.