Los primeros circuitos turísticos serán para conocer las represas Pichi Picún Leufú y Alicurá, de Piedra del Águila. Para ello ya se reunieron representantes de distintos organismos públicos con directivos de las hidroeléctricas que operan en la zona, tales como los gerentes de administración, Benito Colque y Rolando Charriol, respectivamente. Ambas partes –la pública y la privada- están buscando la posibilidad de abrir al público dichos complejos energéticos mediante un programa de visitas guiadas.
El embalse de Alicurá es el primero de los cinco diques sobre el río Limay, fue inaugurado en 1985. Se usa primariamente para generar hidroelectricidad y posee un reservorio que se emplea para la cría de salmones y truchas de río.
Respecto del Embalse Pichi Picún Leufú, es el tercero de cinco embalses sobre el río Limay y se ubica a unos 230 km aguas arriba de la ciudad de Neuquén Capital. Genera hidroelectricidad y regula el caudal del río Limay, mide 45 metros de alto y 1.045 m de longitud. Su inauguración data del 1.999 y fue construido por un consorcio formado por la multinacional sueca Skanska, la argentina IMPSA (Industrias Metalúrgicas Pescarmona); la obra civil fue realizada por las constructoras Odebrecht (Brasil) y Benito Roggio (Argentina).
En el encuentro se acordó un plan de trabajo en el cual se destacan acciones en materia de formación de guías para recibir a los visitantes, el diseño y la planificación de los futuros circuitos turísticos y recreativos.
El gobierno neuquino busca involucrar a los turistas de una manera directa y participativa integrando a la ciencia académica con la educación ambiental y el turismo.