La construcción avanza rápidamente, y se espera que esté terminada a finales de año. Con alrededor de 20 obreros trabajando intensamente, el nuevo supermercado promete ser el más grande de la ciudad y similar en tamaño y características a las sucursales de Cipolletti. La entrada principal estará ubicada en la esquina de Cafrune e Irigoyen.
La apertura de La Anónima representa una competencia significativa para La Cooperativa Obrera, que cuenta con dos sedes en la ciudad, y para el supermercado chino, hasta ahora las opciones más grandes disponibles para los residentes. Muchos vecinos ven con buenos ojos esta incorporación, destacando la generación de empleo y la modernidad del nuevo establecimiento. "Estamos contentos porque va a traer fuente de trabajo, importantísimo eso. Y después va a ser de los super más modernos que haya en la región por lo que tengo entendido, está buena la idea. Era necesario, algo grande, que esté bien hecho. Vivo cerca y siempre paso por ahí”, comentó un comerciante local.
Sin embargo, también existe preocupación sobre el impacto que esta gran cadena podría tener en los pequeños comercios y despensas barriales. La llegada de La Anónima, una empresa con fuerte presencia en la Patagonia, podría significar un desafío considerable para los emprendimientos locales en términos de competencia.
La expansión de La Anónima no se detiene en Fernández Oro. Con una inversión de 20 millones de dólares, la cadena de supermercados planea abrir nuevas sucursales en diversas regiones de Argentina, incluyendo San Patricio del Chañar, Río Gallegos, Bella Vista y otros puntos estratégicos en la zona petrolera de Vaca Muerta. Esta expansión no solo busca fortalecer su presencia en el mercado minorista, sino también contribuir al desarrollo económico y generar oportunidades de empleo en las regiones donde opera.
A pesar del optimismo de algunos, la llegada de La Anónima a Fernández Oro no será recibida con agrado por todos. Las opiniones están divididas, y mientras unos celebran las nuevas oportunidades, otros temen por el futuro de los pequeños comercios. La apertura de este supermercado plantea una pregunta crucial para la comunidad: ¿Beneficiará a la economía local o será una amenaza para los negocios tradicionales?
Además, la cadena de supermercados ha destacado su compromiso con la comunidad local, anunciando que implementará diversas iniciativas sociales y programas de descuentos especiales para residentes de Fernández Oro. Estas medidas buscan mitigar las preocupaciones sobre el impacto negativo en los pequeños comercios y reforzar la imagen de La Anónima como una empresa que se integra y contribuye al bienestar de las comunidades donde opera. En otras ciudades, estos programas han demostrado ser efectivos para ganar la aceptación y el apoyo de los habitantes, lo que podría replicarse en Fernández Oro si se implementan de manera adecuada.
En este contexto, el desafío para La Anónima será equilibrar su expansión con la sostenibilidad de los negocios locales. La clave estará en cómo la empresa maneje su integración en la comunidad, buscando sinergias con proveedores locales y ofreciendo productos que reflejen las preferencias de los habitantes de Fernández Oro. Así, la apertura de esta nueva sucursal no solo representará un cambio en el panorama comercial de la ciudad, sino también una oportunidad para demostrar que el crecimiento económico y el respeto por las estructuras comerciales preexistentes pueden coexistir armoniosamente.
La Anónima abrirá una nueva sucursal en Fernández Oro (qué expectativas y controversias se esperan)
La ciudad de Fernández Oro, en la región del Alto Valle, se prepara para recibir una nueva sucursal del supermercado La Anónima. Esta imponente estructura, ubicada junto al club de fútbol Trueno Verde, está causando revuelo entre los vecinos, con opiniones divididas sobre su llegada.