“El año pasado tuvimos un crecimiento de casi un 4% y este año está previsto que sea del 5%”, señaló Koenig, en relación al Producto Bruto Interno (PBI) provincial. Al asumir junto con el gobernador Rolando Figueroa, enfrentaron un panorama complicado, pero lograron ordenar las cuentas, reducir gastos innecesarios y asumir obras originalmente financiadas por la Nación.
Koenig explicó que el presupuesto 2025, ya aprobado, representa un paso hacia la previsibilidad, incluyendo acuerdos salariales con los gremios estatales. Resaltó que en 2024, la inflación y una devaluación inicial impactaron las finanzas provinciales, pero el aumento en la producción de hidrocarburos permitió sostener los ingresos.
“Invierta en Neuquén”, una ley presentada por el gobernador, busca atraer inversiones económicas mediante incentivos. Este programa complementa al Régimen de Incentivo a Grandes Inversiones (RIGI) de la Nación, creando un marco favorable para el desarrollo.
El ministro advirtió que, aunque las expectativas son positivas, será fundamental que tanto el Estado como el sector privado se preparen para capitalizar el crecimiento previsto. “Los números para la provincia seguramente serán buenos”, afirmó.
En cuanto al sector hidrocarburífero, subrayó que el aumento en la producción fue crucial. “Si no subieran las cantidades, probablemente tendríamos muchos problemas, porque la inflación superó ampliamente el ajuste cambiario”, indicó. Este incremento permitió compensar los efectos adversos de un contexto macroeconómico complejo.
Koenig recordó que al inicio de la gestión enfrentaron serios problemas financieros, como atrasos en el pago a proveedores. La solución fue realizar un ajuste en las cuentas públicas, enfocándose en la reducción de gastos para evitar una expansión descontrolada del presupuesto.
El contexto nacional también influyó significativamente. La política del gobierno central, orientada al superávit fiscal, redujo partidas discrecionales y afectó la coparticipación. Esto derivó en menos fondos para obras públicas y subsidios en sectores como transporte y educación.
Frente a este panorama, Neuquén optó por asumir con recursos propios las obras paralizadas por la Nación. “Fue necesario gestionar el traspaso de esas obras a la provincia y renegociar contratos con las empresas involucradas”, explicó el ministro.
Koenig destacó que, a pesar del esquema recesivo a nivel nacional, Neuquén logró mantener una base sólida para el desarrollo. “Lo primero que teníamos que hacer era ordenar las cuentas del Estado. Ahora, con el presupuesto aprobado, tenemos una visión más clara para avanzar”, afirmó.
El ministro consideró que la previsibilidad lograda gracias al presupuesto es un factor clave para generar confianza en los actores económicos y garantizar acuerdos salariales que brinden estabilidad a los trabajadores estatales.
Finalmente, Koenig reiteró que la clave del éxito provincial radica en mantener un equilibrio entre la producción de hidrocarburos, el control del gasto público y la promoción de inversiones. “La caída de la inflación nos permite planificar mejor, lo que es fundamental para el desarrollo sostenible de la provincia”, concluyó.
Orden fiscal y crecimiento económico: las claves para el desarrollo de Neuquén
El ministro de Economía, Producción e Industria de Neuquén, Guillermo Koenig, afirmó que el crecimiento de la provincia estará impulsado por las inversiones de empresas hidrocarburíferas y programas como Invierta en Neuquén. En una entrevista, destacó la reorganización fiscal como clave para enfrentar los desafíos económicos.
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