Los trabajos en la planta van a iniciar con la producción de truchas que lleva adelante “Idris Patagonia”. La firma es concesionaria de la infraestructura, “pero a su vez tienen producción, y en el mismo contrato de concesión de la planta se exigía al adjudicado a que, por lo menos, el 30 por ciento de la faena esté permitida a productores locales. Vamos a trabajar desde la Provincia en esa interacción” indicó el ministro López Raggi.
La actividad acuícola es clave en lo que hace a la ampliación y diversificación de la matriz productiva de la provincia, uno de los ejes del Plan Quinquenal 2019-2023. A su vez, el sector generará su aporte en el ingreso de divisas: como la expectativa de producción supera la demanda local, se deberá colocar el producto en los mercados externos. La exportación se avizora también con la utilización de la carga aérea a través del aeropuerto de Neuquén.
“Estamos con mucha expectativa, estoy convencido de que este año va a ser el año de despegue de la acuicultura. Tenemos un grupo de 10 productores que vienen trabajando hace 15 o 20 años en la acuicultura a los cuales seguimos apoyando. Pero últimamente se han ido incorporando otros proyectos que vienen con un esquema de negocio que tiene una mirada netamente exportadora”, explicó López Raggi.
Hasta el momento, la producción local se basaba en la trucha tamaño plato, pero ahora “se busca producir truchas para competir con el salmón, truchas de 2,5 kilos promedio” explicó el ministro.
“Para poder exportar, los mercados de destino son demandantes y requieren cierto tipo de producto, de información de ese producto como la trazabilidad, no solamente del producto en sí, sino del alimento que consumió el pescado durante todo el proceso” comentó López Raggi.
A su vez, el estatus sanitario es un diferencial competitivo relevante en los mercados más exigentes a nivel internacional. La provincia de Neuquén, junto su par de Río Negro e instituciones como la AIC y SENASA trabaja para unificar los procesos de control y fiscalización para asegurar el estatus sanitario que tiene actualmente Alicurá, que cuenta con reconocimiento internacional, mientras que la del embalse de Piedra del Águila está en trámite.
López Raggi agregó que “Nación está comprometida con la acuicultura. Estamos trabajando bien y fiscalizando el tema ambiental porque es clave para este sector tener el estatus sanitario que hay actualmente. Esto se hace también con el resto de los organismos provinciales, como las subsecretarías de Medioambiente y de Recursos Hídricos, para sostener el estatus sanitario. Y esto significa monitorear de cerca las producciones y todo lo que hace la actividad”.