Enrique lleva la bandera argentina bien alto, es un reconocido deportista paralímpico y, por estos días la novedad viene desde el sector comercial, ya que junto a su amigo y empresario del sector informático Mariano, lograron plasmar estos acoples para las sillas de ruedas. A la vista y a la utilidad las transforma en un vehículo que puede utilizarse con pedales o bien con un motor, según los dos modelos que pronto saldrán al mercado argentino.
“Los dispositivos de por sí llaman mucho la atención, son lindos y livianos, incluso me ven a mí con estas adaptaciones e inmediatamente me piden referencias, ya estamos a poco de presentar nuestros dos primeros modelos en el país”, nos explica Plantey de camino a su trabajo.
Sin tener una experiencia previa y, a pocos años de conocerse, la amistad pudo más y en el momento donde se afianzaba esa relación, se “metieron” de lleno en el mundo empresario y luego de tres años lograron desarrollar el proyecto, traspasando las típicas etapas críticas con diferentes expertos en ingeniería, sumada a una serie de estudios de mercado que finalmente los conformara, “hoy el producto final que se consiguió es realmente competitivo”, menciona.
Tal es así que es necesario señalar que al momento de tomar contacto con Plantey, de camino a sus tareas diarias en el Consejo de la Magistratura de Buenos Aires, y luego de haber remado unas cuantas horas por la mañana, “en estos momentos voy utilizando la handbike para ir a mi trabajo”, indica sin tantas vueltas.
Los modelos que verán la “luz” comercial en los primeros días de diciembre de este año son dos, el primero es la “handbike”, la que a él le gusta más, y se define como “un sistema de acople que lo ponés en tu silla, tardas unos 30 segundos y salís andando. Fácil, segura, liviana y linda”, ese es el TorukM (y viene con 8 cambios Shimano y manoplas ergonómicas). Y además llegará el TorukE y, para seguir respetando sus frases “muy” marketineras, se explica así: “apretás un botón y salís andando. Es simple, linda, potente! Alcanza unos 25 km por hora y el anclaje que queda en tu silla pesa menos de un kilo”, este modelo funciona con un motor eléctrico a batería de litio, tiene autonomía de unos 15 km y freno a disco, “una nave”.
“Son dos tipos de dispositivos que cumplen muy bien su función, realmente nos costó tanto encontrar que sean fáciles, livianos y estéticamente agradables que a poco de terminarse el contrato de fabricación con el equipo de ingenieros –unos tres meses- ya estamos más cerca de tener nuestras primeras bicicletas a la venta”, indicó Plantey, uno de los pocos “olímpicos” neuquinos.
En esta nueva faceta como empresario entiende que “si bien con Mariano tenemos una relación de amistad, creo que el proyecto se fortalecerá una vez que hagamos el lanzamiento, y que por supuesto nos llevará mucho más tiempo del que le estamos dedicando ahora”. Para Plantey la etapa de “comercialización” será fundamental porque deberá compartir espacio de tiempo con su vida deportiva, claro está, esto lo lleva en su sangre, es pura constancia y serio a la hora de entrenarse.
Este año luego de competir en las Paralimpíadas de Pyeong Chang en Korea, “definimos con el entrenador hacer un parate, esquiar muy poquito, pero vamos a retomar en enero ya que me voy a preparar para la temporada europea”.
Más allá de las propias ansias que debe sentir Plantey a poco de lanzar los “toruks” al mercado, sus días se pasan “atrapando” olas desde su kayak-surf. De todas maneras sigue entrenando a la mañana y a la noche, “remar es una recreación, el deporte por el que vivo es el esquí, ya voy por mi segunda olimpiada y hace ya ocho años que pienso en mejorar mis marcas para seguir disfrutando de esto que tanto me enamora”.