De acuerdo con el informe difundido ayer a la mañana por el medio Telám, "el ciclo de contracción económica redujo la frecuencia de compra, reconfiguró las preferencias de canales y las marcas, y produjo fuertes caídas en categorías como lácteos (-11%) o refrigerados (-13%)".
E indicaron que "El consumo en los últimos años muestra los avatares de la administración saliente y la inflación aparece como su principal enemigo", indicó el informe elaborado por el Centro de Liderazgo en Mercados y Retail del IAE Business School.
"En los últimos cuatro años, el salario siempre perdió frente a la inflación, y esto se refleja en el traslado hacia marcas B, C o Marcas Propias", agregó su director, Guillermo D'Andrea.
Además, "el cuadro del consumo muestra importantes cambios de hábitos que se han venido consolidando en estos años difíciles: los más segmentos más altos -ABC1-, registran algún movimiento hacia marcas B, e incluso hacia marcas propias, pero al fin solo representan apenas 10% del consumo".
En cambio, agregó, "en los niveles medio bajo y bajo que absorben 87% del consumo, su principal interés es dejar de caer o simplemente sobrevivir, con los niveles de ingresos más bajos situados por debajo de los $ 15.000".
Según la consultora Scentia, citada en el informe, "pañales y pizzas congeladas migran hacia marcas B, categorías como dulce de leche, crema y leche chocolatadas migran hacia B y C, en tanto quesos, margarinas, congelados de carne, sardinas y puré instantáneo son más proclives a moverse hacia marcas propias".