Los datos surgieron de la primera semana de diciembre (este “sondeo” va por su octavo año consecutivo), allí se tomó nota de los precios de los 20 productos básicos y tradicionales que constituyen la compra para la “mesa navideña”.
Los productos fueron relevados en tres grandes superficies de la capital neuquina, divididos por su tipo: bebidas, alimentos secos, alimentos frescos para la cena y alimentos complementarios de la cena.
El total ascendió a unos $ 2.124, es decir, un 54% mayor que el registrado el año pasado ($ 1.382) y un 227% mayor al de 2015 ($ 649). En este último año se registró una importante aceleración en el incremento de los precios mientras que el aumento promedio anual entre 2018 y 2015 fue del 30% (ahí muy cerca del doble).
En cifras contundentes las bebidas (gaseosa, cerveza, vino tinto, sidra, agua mineral) tuvieron una variación (2018-2019) de un 57%, pasando de $ 387 a $ 606, los alimentos secos (pan dulce, budín, turrón, garrapiñada, ensalada de frutas) un 62% de $ 336 a $ 543, para los alimentos frescos de la cena (pollo, asado, papas, zanahorias, huevos) un 40% más, esto es de $ 444 a $ 623.
Por último, en los alimentos complementarios de la cena (mayonesa, atún, arroz, arvejas, baguette) se registró un 64% más, número que se desprende la variación de $ 215 a $ 352.