"Hacia los vinos de alta calidad", afirma con convicción Marcelo Miras cuando se le pregunta sobre la dirección de la vitivinicultura en Río Negro. Destaca la importancia de los antiguos viñedos, algunos con casi 100 años de historia, y los nuevos plantados con variedades de uvas reconocidas, desde Malbec y Merlot hasta Sauvignon Blanc y Riesling. Además, señala el impacto positivo de la tecnología en el manejo de las viñas y las bodegas, mejorando los procesos productivos.
Miras enfatiza el papel esencial del enoturismo en el crecimiento de la región, destacando la excelencia en servicios y un futuro prometedor. Además, resalta las prácticas sustentables, subrayando la importancia de una vitivinicultura agroecológica, orgánica o biodinámica para producir vinos y espumosos de calidad excepcional.
Cuando Miras llegó a la región en los años 90, la vitivinicultura de la Patagonia se centraba principalmente en la producción de "vinos de mesa". Sin embargo, bodegas como Humberto Canale ya estaban trazando el camino hacia vinos varietales de mayor calidad. Con la incorporación de tecnología y la llegada de expertos como Hans Vinding Diers en 1999, los vinos de la región alcanzaron niveles superiores.
Al reflexionar sobre la evolución de la imagen de la Patagonia y sus vinos en el mercado, Miras destaca el crecimiento tanto a nivel local como internacional. La región, especialmente Río Negro, se ha destacado por una vitivinicultura reconocida por su calidad, impulsada por el trabajo minucioso de pequeños productores y el compromiso de las bodegas tradicionales.
En su rol como director de Viticultura de Río Negro, Miras se centra en apoyar a los productores vitivinícolas, especialmente a los pequeños, mediante políticas gubernamentales destinadas a mejorar la calidad de las uvas y vinos. Destaca la importancia de conservar los viñedos longevos como un valioso patrimonio vitícola, con cepas como Malbec, Merlot, Semillón, y Riesling que poseen un inmenso valor histórico y enológico.
La marca Patagonia ha estado en el centro de la controversia debido al intento de algunas bodegas externas de utilizarla. Miras asegura que la Indicación Geográfica Patagonia, reconocida desde 2002, solo puede ser usada por productores de la región. La Cámara de Bodegas Exportadoras de la Patagonia trabaja incansablemente para promover y proteger la denominación, colaborando con gobiernos y entidades vitivinícolas para acciones a nivel internacional.
La visión de Marcelo Miras sobre la vitivinicultura de Río Negro destaca la importancia de la calidad, la tradición y la sostenibilidad. En este rincón de la Patagonia, la combinación de antiguos viñedos, nuevas tecnologías y un compromiso inquebrantable con la excelencia vinícola aseguran un futuro prometedor para la región y sus vinos.