Ubicado sobre la Ruta 17, uno de los corredores estratégicos de la cuenca neuquina, el proyecto alcanza así un total de 166 unidades habitacionales, destinadas tanto a profesionales del sector petrolero como a empresas y trabajadores vinculados con los servicios industriales que crecen en torno a la actividad.
La ampliación del complejo responde a la fuerte demanda de alojamiento en la región, impulsada por la expansión de Vaca Muerta y el aumento del personal técnico y operativo que requiere estadías prolongadas en la zona. Las nuevas unidades están disponibles en formatos de uno y dos dormitorios, con superficies que van desde 26 m2 hasta 44 m2, y un valor de preventa inicial de US$ 100.000.
Con esta tercera etapa, ZLT refuerza su apuesta por el modelo de inversión inmobiliaria en torno a los polos productivos. El esquema está orientado a captar capital privado que busca combinar rentabilidad y resguardo patrimonial en un contexto de alta demanda habitacional.
Los departamentos están completamente equipados y cuentan con servicios diseñados para brindar confort y seguridad. Entre ellos se incluyen vigilancia permanente, mantenimiento integral, limpieza, recolección de residuos, internet de alta velocidad, estacionamiento y servicio de recambio de ropa blanca.
El complejo se adapta tanto a estadías corporativas temporales como a residencias permanentes, un formato cada vez más requerido por empresas que buscan alojar personal en zonas cercanas a los yacimientos y parques industriales.
La construcción estará a cargo de Cititek, unidad del Grupo Edisur, que implementa el sistema de construcción off site, una metodología industrializada que permite optimizar plazos y garantizar altos estándares de calidad y eficiencia energética.
Gracias a este sistema, cada módulo se produce en planta y se ensambla en el predio, reduciendo los tiempos de obra y el impacto ambiental. Este modelo de edificación ya fue aplicado con éxito en la segunda etapa de Álamos, donde permitió acelerar la entrega de unidades y reducir costos operativos.
La gestión de las propiedades estará centralizada por ZLT, que administra el pool de renta consolidado del proyecto. Los inversores reciben rentas mensuales, con una rentabilidad estimada entre 12% y 14% anual, sustentada en la alta ocupación del complejo y la demanda sostenida de alojamiento en el área.
La empresa informó que los inversores interesados pueden acceder a diferentes alternativas de participación, desde unidades completas hasta esquemas de copropiedad, adaptados a perfiles individuales y corporativos.
Desde ZLT destacaron que esta nueva etapa de Álamos “reafirma la visión de generar desarrollos inmobiliarios sostenibles, modernos y rentables, que acompañen el crecimiento de la industria energética y contribuyan al desarrollo urbano de la región”.
El emprendimiento se integra a una zona de alto dinamismo económico, próxima a parques industriales, bases logísticas y servicios petroleros, lo que lo posiciona como una oportunidad estratégica para quienes buscan invertir en el entorno de Vaca Muerta.
Con esta expansión, ZLT consolida su liderazgo en el segmento de desarrollos habitacionales vinculados a la actividad energética, aportando infraestructura moderna, rentabilidad atractiva y una alternativa concreta para canalizar inversiones en la Patagonia argentina.