La reunión se desarrollará desde las 11 de la mañana en el Centro de Convenciones y Exposiciones Domuyo, ubicado en la Isla 132 de la capital neuquina. Allí, ministros, secretarios y referentes técnicos de ambas jurisdicciones trabajarán en mesas temáticas que abarcarán diversos aspectos de la gestión pública.
La iniciativa tiene como propósito principal fortalecer la cooperación entre Neuquén y Río Negro mediante la elaboración de una agenda común que permita mejorar la calidad de vida de sus habitantes y posicionar a la Norpatagonia como un bloque estratégico a nivel nacional e internacional.
En este primer encuentro se debatirá una batería de temas considerados prioritarios, que luego serán elevados al Comité Binacional Argentina-Chile, que sesionará los días 25 y 26 de junio. De esta manera, el trabajo conjunto entre ambas provincias tendrá también proyección internacional, particularmente en lo que respecta a integración fronteriza y corredores bioceánicos.
Río Negro organizará su participación en torno a una decena de áreas clave: Economía e infraestructura; Producción e industria; Energía y recursos naturales; Mujeres y diversidad; Desarrollo social y trabajo; Culturas; Niñez, adolescencia, juventud y ciudadanía; Deportes; Gobierno y educación; Salud y Turismo. Cada una de estas mesas buscará delinear políticas con impacto concreto y sustentable.
Por su parte, Neuquén abordará ejes similares, sumando las temáticas de planificación, innovación y modernización, además de seguridad, jefatura de gabinete y trabajo con gobiernos locales. La inclusión de estas áreas refleja una mirada integral que busca combinar lo productivo con lo institucional y lo social.
Cada mesa contará con un representante designado por cada provincia, quienes tendrán la responsabilidad de coordinar el seguimiento de los acuerdos alcanzados. Esto permitirá una gestión más eficiente y articulada, con plazos y objetivos claros.
En total, se expondrán 12 temas considerados urgentes y otros 28 principales. Estos puntos conformarán la agenda inicial de trabajo entre ambos gobiernos, la cual será plasmada en un acta que servirá de guía para el desarrollo de políticas conjuntas.
La redacción del acta será uno de los momentos más relevantes del encuentro, ya que implicará el compromiso político y técnico de las dos administraciones para avanzar en una planificación estratégica conjunta de mediano y largo plazo.
Se espera que esta metodología de trabajo se replique en nuevos encuentros futuros, generando una dinámica institucional de cooperación permanente entre Neuquén y Río Negro. El fortalecimiento de una identidad regional y la defensa de intereses comunes son pilares del acuerdo.
El cierre de la jornada estará a cargo de los gobernadores Weretilneck y Figueroa, quienes expondrán las conclusiones del encuentro y reafirmarán el compromiso político de consolidar una Norpatagonia integrada, productiva y con proyección internacional.
Este primer paso marca un hito en la relación entre ambas provincias, que históricamente compartieron vínculos culturales, económicos y sociales, pero que ahora buscan transformar esa cercanía en un proyecto regional con visión de futuro.
Con esta iniciativa, Neuquén y Río Negro apuestan a una nueva forma de gobernar, basada en la cooperación, la planificación y la construcción colectiva de soluciones para los desafíos del presente y del mañana.