Este robot, que recientemente se ha integrado al servicio de autoservicio Full de una sucursal de YPF cercana a la Ruta 22, ha generado un abanico de reacciones entre los clientes. Desde la sorpresa inicial hasta la especulación sobre posibles repercusiones en el empleo, el nuevo dispositivo ha suscitado diversas opiniones.
El robot en cuestión es una estructura rectangular de color blanco, equipada con múltiples bandejas apiladas, luces indicadoras de disponibilidad y un sistema de ruedas que le permite desplazarse hacia las mesas de los clientes. Además, cuenta con una pantalla que ofrece indicaciones y hasta emite una sonrisa para brindar una experiencia más personalizada. Su llegada ha sido acompañada de comentarios sobre su cortesía, manifestada a través de saludos y despedidas con acento español.
Sin embargo, no todo ha sido elogios para este avanzado dispositivo. Algunos clientes han expresado preocupación por posibles inconvenientes, como derrames de bebidas debido a las vibraciones del robot. En consecuencia, en ocasiones, el personal de la estación ha tenido que intervenir para evitar estos percances.
A pesar de las críticas y los ajustes que aún se requieren en su funcionamiento, la introducción de este tipo de tecnología representa un paso hacia la automatización de servicios que antes dependían exclusivamente del trabajo humano. Esta tendencia no es exclusiva de las estaciones de servicio, ya que otros sectores, como el cine y los supermercados, también han adoptado sistemas similares.
La presencia del robot en la estación de servicio ubicada en la intersección de la Ruta 22 y la Avenida Roca ha generado interés y curiosidad entre los clientes, aunque su disponibilidad no siempre es garantizada.
Esta modernización en la atención al cliente, aunque pueda suscitar debate, demuestra cómo la tecnología está transformando gradualmente diversas industrias, con el potencial de agilizar procesos y mejorar la experiencia del usuario.
A pesar de las posibles reticencias iniciales, la introducción de este mozo robot también sugiere una evolución inevitable en la forma en que interactuamos con la tecnología en nuestra vida cotidiana. Esta iniciativa no solo refleja la búsqueda de eficiencia y comodidad por parte de las empresas, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro del empleo en un mundo cada vez más automatizado. Si bien algunos pueden temer que estas innovaciones reemplacen puestos de trabajo, otros argumentan que liberan a los empleados de tareas monótonas y les permiten dedicarse a funciones más creativas y significativas.
Por otro lado, la presencia de este robot en una estación de servicio, un lugar tradicionalmente asociado con la atención personalizada, señala un cambio en las expectativas y preferencias de los consumidores. La aceptación y adaptación a estas nuevas formas de interacción pueden ser un indicador de cómo la sociedad está abrazando gradualmente la integración de la tecnología en todas las facetas de la vida diaria, incluso en los lugares más inesperados. En última instancia, la experiencia con este mozo del futuro en General Roca podría ser un presagio de las transformaciones más amplias que están por venir en la intersección entre la tecnología y el servicio al cliente.
La transformación tecnológica llega a las estaciones de servicio: el nuevo mozo robot ya te “atiende” en General Roca
Una innovadora propuesta ha surgido en una estación de servicio en General Roca, Río Negro, que ha captado la atención tanto de los habitantes locales como de los viajeros que hacen escala en la ciudad. Se trata de un revolucionario sistema de atención que incorpora un robot "mozo del futuro" para colaborar en la entrega de pedidos a los comensales.