La celebración de estos 30 años en la moda no será un desfile tradicional, sino un evento social y cultural que fusionará las grandes pasiones de Karina: el teatro, la música y sus diseños de alta costura. Más de 320 invitados vinculados al mundo de la moda y las tendencias en Neuquén se reunirán en una recepción previa al evento.
La pieza central de la noche será una performance actoral en la que 14 artistas en escena recrearán fragmentos de la obra literaria "La casa de Bernarda Alba", del escritor español Federico García Lorca. Lo destacable es que Karina Saade integrará sus diseños a la puesta en escena, uniendo modelos, actores y bailarinas en una sinergia creativa única.
Este evento innovador es respaldado por la Subsecretaría de Cultura de la ciudad de Neuquén y cuenta con la colaboración de Bárbara Verselis, directora de la puesta de actrices, Florencia Arienti, directora de las bailarinas, y el prestigioso Instituto Visso, que coordina a las modelos.
La elección del Museo Nacional de Bellas Artes como escenario no es casual. Karina Saade busca establecer un precedente en la relación entre diseño de indumentaria, cultura y arte, con el objetivo de abrir nuevas posibilidades en la moda local y demostrar que vestir durante 30 años a la mujer neuquina con creatividad local es parte de la identidad cultural de la región.
Este evento también rinde homenaje al esfuerzo y los desafíos que implica crear moda desde y para la Patagonia, destacando la inspiración y la creatividad locales que nada tienen que envidiar a las grandes ciudades del mundo.
Karina Saade, originaria de Tucumán pero radicada en Neuquén desde hace muchos años, es una apasionada del arte y la ropa desde su infancia. Sus primeros pasos en el mundo artístico fueron en el teatro, donde estudió arte dramático en Tucumán y continuó su formación en Buenos Aires. Aunque nunca pudo ejercer la actuación, encontró una nueva pasión en el diseño de indumentaria.
Karina se convirtió en una diseñadora autodidacta, aprendiendo a través de la experiencia y la experimentación. Posteriormente, se formó en moldería, realizó cursos de diseño en diversas instituciones y dominó técnicas de alta costura. Así nació su marca de ropa, "Kisuhara", que toma su nombre de una palabra de origen Aymara con propiedades curativas.
La evolución de Kisuhara ha sido impresionante, pasando de prendas sencillas de verano a diseños icónicos en el Valle de Neuquén. Actualmente, Karina atiende a sus clientas en su showroom en el barrio Jardines del Rey, donde confecciona indumentaria femenina minimalista y romántica, tanto para el uso diario como para ocasiones especiales.
En resumen, Karina Saade celebra tres décadas en la moda neuquina fusionando arte, teatro, música y diseño de alta costura en un evento que promete dejar huella en la historia de la moda local. Con su creatividad, identidad cultural y pasión por abrazar a través de la moda, Karina Saade ha marcado una profunda influencia en la forma en que las mujeres de Neuquén se visten y se expresan a lo largo de los años. Esta celebración es su manera de agradecer a todas las generaciones de mujeres a las que ha tenido el privilegio de vestir durante estas tres décadas.