Se conoció que los gobernadores de las provincias petroleras (son 10 distritos) trabajan en un documento que releva el grado de cumplimiento de ese decreto nacional 488/2020, que incluso “habilita una revisión trimestral del precio del barril”. La preocupación de los mandatarios llegó luego de lo percibido en mayo y junio
“Las entregas de petróleo crudo en el mercado local deberán ser facturadas por las empresas productoras y pagadas por las refinadoras” como parte del fundamento que analizaron -propio en el decreto- y con la referencia clara de los US$ 45 por barril.
En Neuquén, el gobernador Omar Gutiérrez, mensuró días atrás el monto estimado de regalías a reclamar por el menor precio, que es del orden de los $ 280 millones.
En mayo de este año, fue la calificadora de riesgo Moody's quien destacaba que el barril criollo aumentaría los ingresos e introduciría una mejora en la calidad crediticia de las provincias y de las empresas productoras del hidrocarburo (sobre todo del no convencional).
Además Moody's dijo que era positivo para quienes producen en el yacimiento neuquino de Vaca Muerta, y fijó su punto -al igual que la Ofephi hoy- en “las entregas de petróleo crudo en el mercado local”.
Si bien son las primeras discrepancias por regalías mal liquidadas a las provincias, no se puede perder de vista que éstas se han visto negativamente afectadas por la reciente caída en los precios internacionales.
"Las regalías se pagan en moneda local al tipo de cambio de venta del dólar, que proporciona una cobertura natural a la deuda denominada en dólares de las provincias", explicó en su momento Moody's, y esto se tornó relevante cuando "en el contexto actual de depreciación significativa de la moneda, las coberturas de moneda extranjera son una consideración crediticia sustancial".
El barril criollo fue aplaudido por las provincias ni bien se conoció su precio sostén, de alguna manera Nación busca apoyar la inversión y la actividad general en el sector, evitando que las importaciones netas de energía crezcan en el futuro, “un camino que va en contra del objetivo de autosuficiencia energética" sentenciaba Moody’s.