Luján, ¿cómo definís tu negocio y cuál es tu historia?
- Guardapolvos Locos nació como una necesidad personal. En 2006 cuando estaba estudiando para maestra jardinera y tenía que usar un guardapolvo para las prácticas, quería hacer algo completamente diferente, que representara la esencia y alegría de la maestra jardinera. Los guardapolvos que se usaban en ese entonces me parecían simples y aburridos. Así que me hice un guardapolvo muy loco, con una muñeca en el frente.
Creí que me iban a tildar de ridícula, o de osada, sin embargo, gustó y me empezaron a pedir guardapolvos. Así fue como empecé a confeccionar algunos por pedido y fui creando y probando ideas y diseños nuevos. Con el tiempo, los empecé a vender en ferias locales y a publicarlos en Facebook.
En general, las maestras compran los guardapolvos a personas que se acercan al jardín o la escuela, o se van pasando datos de dónde comprar un guardapolvo lindo. Pero si querían un GL tenían que hacerlo de una forma diferente porque no podía acercarme a las instituciones a venderlos ya que, en ese entonces había nacido mi séptima hija y me resultaba prácticamente imposible salir de casa. Por eso les sacaba foto en mi casa y los publicaba en una precaria cuenta de Facebook. Esto me permitió llegar a toda la Argentina.
En octubre de 2011, junté coraje y participé con un stand de Guardapolvos Locos en uno de los congresos de EDIBA (la editorial de revistas y material docente más reconocida de Argentina). La directora de la revista quedó fascinada con los diseños y me ofreció la posibilidad de publicarlos. Así fue como en marzo de 2012 aparecieron publicados 5 de mis diseños en la revista Maestra Jardinera. Esto generó un impacto tremendo, de hecho, cambió la forma de ver el guardapolvo.
Meses más tarde llegaba el registro de marca del INPI. Si bien han surgido muchas opciones de guardapolvos de diseño durante estos años, GL ha podido construir una identidad de marca con una personalidad propia, que genera una empatía especial con el entorno. Las telas experimentales, las paletas de colores osadas y basadas en conceptos de arte y moda, hacen que las usuarias se enamoren de su diseño y no sean clientas sino Fans (#FansGL es uno de los hashtags que usamos para crear comunidad). Algunas maestras tienen una colección propia de más de 20 guardapolvos.
¿Cuál considerás que es el aporte más significativo que puede llegar a tener?
- La innovación, los diseños creativos y originales, la constante búsqueda y experimentación con telas y bordados no convencionales, las paletas de colores contrastantes, el diseño basado en conceptos, pensados como una composición equilibrada, y la gran pasión que me genera diseñarlos, es el ingrediente secreto para que Guardapolvos Locos sea una excelente opción a la hora de elegir un guardapolvo distinto. El feedback de las maestras es un aporte muy valioso. Son ellas, las #fansGL, las que siempre me animan a seguir creando y diseñando ideas locas, cuando me dicen lo felices que se sienten porque les llegó el guardapolvo que encargaron y está buenísimo, o cuando las mamás me cuentan lo felices que están los peques con su guardapolvo loco y que se lo pusieron y no se lo quieren sacar más…. Son más que un diseño lindo, generan alegría y las maestras (y todos los usuarios GL) se sienten unicas y divinas, y eso es lo que me motiva siempre a seguir un poco más. Pero no sólo las maestras, sino también profesionales de salud y los profes, que poco a poco se animan a usar algo con onda. Y para ellos tengo la línea GL Mens de chaquetas locas especial para maestros.
¿Cómo es, para vos, ser mujeres y trabajar en el rubro?
- Las mujeres emprendedoras tenemos un gran desafío a la hora de poner manos a la obra, como en todos los rubros. Especialmente las que somos madres. En mi caso particular soy mamá de diez hijos, y esto es un combo perfecto para la locura. Personalmente ser emprendedora me permitió poder tn la familia.
Llegó un momento en mi vida en que decidí quedarme en casa, ser mamá full time. Pero había algo adentro mío que no me dejaba quieta, quería expresar algo, hacer algo… y así, fui explorando posibilidades de emprendimientos (sin conocer siquiera el término “emprender”). En estos años pasaron muchísimas cosas. Ser emprendedora me genera una adrenalina especial, pero también grandes momentos de incertidumbre. No es fácil ser emprendedor, pero si la pasión por lo que haces es superior, eso es el motor que te levanta una y otra vez, y podes seguir adelante porque hay algo adentro que te empuja.
¿Qué proyectos a futuro tenés en mente con tu negocio?
-Uno de mis principales desafíos es poder tener revendedoras fuera del país. Pero también soy consciente de la gran cantidad de herramientas que necesitamos los emprendedores para poder llevar un proyecto adelante.
Este año tuve la grandísima oportunidad de participar en la Competencia NAVES y ser uno de los 5 mejores proyectos elegidos en la provincia de Neuquén. Esto me permitió, no solo visibilizar mi trabajo de tantos años, sino también poder entrar en una red de capacitaciones y mentorías de primer nivel, que me está ayudando a dar forma a este emprendimiento. Estoy participando en la instancia nacional con seminarios en el campus del IAE en Pilar, Buenos Aires.
También desde el Centro PyMe Adeneu, recibo capacitaciones y mentorías. Actualmente participo del TOP XV emprendedor, que es un proceso de incubación y acompañamiento integral para 15 emprendimientos de la zona que terminamos en noviembre. Todo esto me va nutriendo y llenando de herramientas muy valiosas que quiero poder transmitir a otros emprendedores.
Creo que el conocimiento compartido y el trabajo de networking colaborativo, son la clave para fortalecer a los emprendedores y, especialmente, a las mujeres.
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