Como señala Manuel A. Broullón-Lozano en su artículo “Por una semiótica del selfie en la cultura visual digital”, el fenómeno de internet se basa, en los últimos tiempos, “en una enunciación demostrativa en primera persona”. Los nuevos dispositivos tecnológicos y sus actualizaciones acompañan a este escenario, ofreciéndonos herramientas sencillas de utilizar para hacer de nuestra casa un estudio de fotografía o, por qué no, de televisión.
En el mundo digital, la red social que quizás supo entender mejor estas nuevas narrativas y formas de comunicarnos es Instagram, que celebró recientemente más de mil millones de usuarios activos (ver aquí). Esta es la plataforma digital por excelencia de los influencers, quienes han marcado una nueva forma de generar estrategias en marketing.
En esta ola de emprendedurismo y empoderamiento femenino, cada vez nos encontramos con más mujeres que lograron constituirse como influyentes en distintas áreas contando lo que mejor saben hacer en formato “selfie” o bien a través de videos en vivo. Desde Infomujeres, destacamos dos cuentas que han cautivado a un gran número de seguidores con consejos e información práctica al mejor estilo “hágalo usted mismo”:
www.instagram.com/mami.albanil es la cuenta de una mujer que decidió hacer los arreglos de albañilería luego de que le enviaran un presupuesto para acondicionar una parte de su casa. Bernandita Siutti vive en San Isidro (provincia de Buenos Aires) y es conocida en Instagram como la autodidacta de la albañilería. “Puse un contenido en redes que no estaba inventado y eso me gusta; igualmente, darle valor a la mujer me gusta más todavía”, comentó en una entrevista reciente (aquí). Su instagram hoy cuenta con más de 73 mil seguidores, donde comparte videos sobre cómo resolver arreglos en la casa de manera creativa y original.
www.instagram.com/mamaemprendearg es el nombre que eligió Ale Leguizamón para acompañar a mujeres emprendedoras. Esta publicista de Buenos Aires cuenta con más de 37 mil seguidores, con quienes conversa ofreciendo contenido práctico para la comunidad femenina que está comenzando a desarrollar su negocio propio. Desde sus redes sociales, a su vez, conecta a mujeres emprendedoras de distintos puntos del país.
Ambas cuentas son un ejemplo de la demanda de contenido espontáneo y útil en redes sociales. Son los usuarios quienes fijan la agenda de temas de los cuales conversar, fenómeno que nos invita a reescribir constantemente la fórmula exitosa para llegar al “me gusta”.
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